Descentralización

Últimamente he estado pensando en cosas raras. Especialmente en que el mundo/universo es mucho menos complicado de lo que creemos. La mayoría de las cosas que nos importan no nos deberían importar y apenas podemos ver las cosas que en realidad son relevantes, aunque sí, todo esto es muy relativo. Pero al fin y al cabo todo es energía, y todo es unidad. Yo no creo la historia en la que existe una bipartición entre lo bueno y lo malo, el cielito y el subsuelo con olorcillo a azufre.

Poco a poco cosas que me parecían esenciales han pasado a ser irrelevantes, o más bien a pesar de que intento prestarles atención, no consigo conectar con ellas. No sé si es muy cuático lo que voy a escribir pero siento que estamos cambiando de consciencia.

Ya no estamos en el renacimiento en el que los hombres (las mujeres no, por supuesto) eran el centro del mundo, y de la atención. Por siglos hemos creído que los homosapiens han de gobernar este planeta azul, sin embargo, aunque a este cambio aun no se le ha dado un nombre, ya tiene una pseudo-forma.

Las nuevas generaciones, en parte los jóvenes y sobre todos los niños, han dejado de percibir el mundo con los hombres al medio. Los animales y las plantas ahora también merecen respeto, y no me cabe duda que dentro de algunos años, tendrán derechos. Puede parecer una obscenidad lo que estoy escribiendo, sin embargo, de verdad lo creo. Y es simplemente lo que dije; un cambio de consciencia y de enfoque y un acercamiento a la unidad.

Quizás antes fui planta, quizás antes fui animal y ahora me toca ser esto que soy.